Según el último informe de seguridad del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS), los vehículos eléctricos son tan seguros para resistir y evitar choques como los autos a gasolina y generan menos reclamos por lesiones.
La agencia de seguridad sin fines de lucro financiada por la industria de seguros basó sus afirmaciones en varios puntos de datos, incluidas las pruebas que otorgaron una mejor opción de seguridad al Ford Mustang Mach-E del 2021 y una mejor opción de seguridad + al Volvo XC40 Recharge del 2021.
Estos modelos al igual que el Tesla Modelo 3 y el Audi E-Tron eléctricos, han ganado el premio TSP + para el 2021.
Con el XC40 Recharge, Volvo mejora su reputación de seguridad, ya que es el único fabricante de automóviles que obtiene un Top Safety Pick + del 2021 en cada vehículo que vende.
«Es fantástico ver más pruebas de que estos vehículos son tan seguros o más seguros que los que funcionan con gasolina y diésel», dijo el presidente del IIHS, David Harkey, en un comunicado. «Ahora podemos decir con confianza que hacer que la flota de EE. UU. Sea más respetuosa con el medio ambiente no requiere ningún compromiso en términos de seguridad».
Para obtener el honor de seguridad más alto de la industria, el modelo debe obtener calificaciones de «Bueno» en las seis pruebas de choque. Debe estar disponible con frenado automático de emergencia que obtenga al menos una calificación de «Avanzado» para evitar o casi evitar un choque con vehículos y peatones a velocidades de 12 mph y 25 mph.
Debe obtener la misma calificación en las pruebas que muestran una reducción de velocidad a 37 mph para evitar o mitigar chocar a un peatón que camina al lado de la carretera.
Además, y lo que es más problemático desde que el IIHS endureció los criterios el año pasado, a los ganadores de TSP se les debe ofrecer faros que califiquen como «Bueno» o «Aceptable», mientras que los galardonados con TSP + deben hacer que esos faros sean estándar.
El Ford Mustang Mach-E del 2021 perdió un TSP + porque los faros de los modelos Select y California Route 1 se clasificaron como «Marginales» por una iluminación inadecuada en las curvas.
Las versiones Premium, GT y First Edition tenían faros «buenos». Es común que los fabricantes de automóviles actualicen los faros delanteros durante un año de producción para apaciguar al IIHS y obtener esa marca adicional.
El IIHS combinó los resultados de estas pruebas con una versión actualizada de un estudio que analizó las pérdidas de seguros para vehículos eléctricos.
Al examinar las reclamaciones por colisión, responsabilidad por daños a la propiedad y lesiones, el Highway Data Loss Institute, afiliado al IIHS, encontró que la tasa de reclamaciones por lesiones para los ocupantes de vehículos eléctricos fue más del 40% menor que para los modelos convencionales idénticos del 2011 al 2019.
Muchos vehículos eléctricos nuevos viajan en distintas plataformas y no tienen equivalentes de ICE, pero la razón de la menor incidencia de reclamos podría ser la misma para los vehículos eléctricos independientes: mayor peso del vehículo.
El XC40 Recharge pesa 4,787 libras, mientras que el XC40 de gasolina pesa 3,811 libras.
El Mustang Mach-E viaja en su propia plataforma sin una contraparte de gasolina, pero sus 4,516 libras superan a muchos SUV de tres filas.
El IIHS atribuyó el mayor peso a los paquetes de baterías, a menudo estirados entre los ejes debajo del piso del vehículo, para la menor exposición general del vehículo en choques.
Tampoco ha encontrado evidencia de que los incendios sean un problema mayor en los vehículos eléctricos que en los automóviles ICE.
Incendios en los vehículos eléctricos
El accidente muy publicitado, de un Tesla Modelo S, el pasado fin de semana pasado en Texas, que posteriormente estalló en llamas y tardó cuatro horas en extinguir, encendió la alarma sobre las preocupaciones de la seguridad contra incendios de los vehículos eléctricos.
Los dos hombres que murieron en ese accidente viajaban a alta velocidad y probablemente murieron en el impacto debido a un error del operador automático del vehículo, ya que el parecer, ninguno de ellos conducía.
Uno estaba en el asiento del pasajero y el otro en el asiento trasero, ya que se cree que estaban probando el sistema de asistencia al conductor del piloto automático de Tesla. La prueba fue su trágico final.
